Hoy en día la gente suele “hacerse” las casas y cambiar les mucho mas a menudo que antes, pero casi todos al intentar imaginar-nos “la casa perfecta” nos hacemos la referencia a un sitio inexistente o al lugar donde habíamos crecido de niños y desde donde habíamos recibido primeros conocimientos sobre todo lo que rodea nuestra existencia.

“Cuando era pequeña mi abuela me hablaba de su oveja negra llamada Gara y los prados llanos donde la llevaba a pastar. Me hablaba del fuente de debajo de la colina y el otro de arriba con el agua aun mas fresca, pero a cual se demoraba mucho a llegar. De los ríos rápidos y las cascadas donde iban a bañarse y lavar ropa. Toda la vida tenia perfectamente dibujado este paisaje en la cabeza excluyendo la posibilidad que este lugar podría existir de verdad.”

(2008) Después de 40 años la abuela vuelve a su pueblo natal. Se había marchado de allí en la lejana 1941 en las umbrales de la II guerra mundial. Acababa de cumplir 14 años. Fue la hija mayor de los 8 hermanos en la familia.
Uno de los últimos recuerdos de Primishlje fue cuando fue enviada por los padres a llevar dos caballos al río para lavar ropa. Un caballo gris y otro rojo acostumbraban hacer la pareja. Al final consiguieron llegar hasta el río, que fue varios kilómetros a distancia desde el pueblo, la niña empezó a sacar las sabanas blancas y lavar las una por una en el río. En un momento los caballos empezaron a inquietarse relinchando y dando coces en sitio. Las hojas en arboles empezaron a temblar removidos por una larga ola de aire. El cielo se encogió oscureciendo en unos segundos para finalmente abrir se echando de si unos choros de agua y pedazos de hielo, todo orquestado por los truenos y rayos haciendo un juego de variación entre si. La niña recogió las sabanas empapadas rápido y escogió el caballo rojo que era mas manso para montar lo y así dirigir se de vuelta hacia la casa. Todos los habitantes del pueblo que tenían la oportunidad de testimoniar este acontecimiento y ver la niña entrando al pueblo montando el caballo con sabanas blancas acompañada de truenos y rayos no podían asegurar con certeza si esto fue un producto de imaginación o una imagen real.

(1) ustasas – ejercito de NDH (Nezavisna Drzava Hrvatska), que se juntaron a las fuerzas de Axis y el movimento nazista. Su objetrivo principal en la zona fue la limpieza del teritorro de los civiles serbios.

(2) se refiere a Operación Tormienta – Organizado en 1995 por el ejercito Croata para recuperar areas de Croacia Central que llevo al desplazamento de 200.000 a 250.000 civiles Serbios de la región. Ja en la dècada dels noranta, Vojna Krajina va tornar a patir un sanguinari conflicte que la va deixar completament devastada. Degut a la secessió de l'antiga Iugoslàvia en diferents estats sobirans, la població majoritàriament sèrbia de la provincia es va trobar formant part de Croàcia. La regió està físicament aïllada de Sèrbia degut a la frontera Bòsnia, situació que crea una espècie de bossa territorial irressoluble. Quan Croàcia declara la seva independència envers Iugoslàvia al 1991, els habitants sèrbis de Krajina i Eslavonia es neguen a secundar la independència envers la República Federal Iugoslava. Del 1991 al 1999, el conflicte polític va esdevindre conflicte armat. En una operació coneguda com "Oluja", es a dir "Tormenta", l'incipient exèrcit croata va acabar imposant-se a les guerrilles paramilitars dels autòctons sèrbis, que tot i ser ajudades per l'exèrcit Iugoslau, van haver de deposar les armes davant la presència dels cascos blaus enviats per la pressió internacional. El conflicte, un més de la riuada que va originar el desmembrament de Iugoslàvia, va provocar desenes de milers de morts i centenars de milers de refugiats i desplaçats.

Los territories como y nada otro no nos pertenecen, pero si hay unos vinculos o relaciones que se crean entre una persona y un entorno / lugar que pueden llegar a ser muy significativos hasta que pueden acabar afectando nos tanto que vayamos por allí exclamando –esto es mi tierra!, cantar los canciones de lagrimas y sangre empapando la tierra paterna, sacrificarnos para ella o añorarla en lejania.